lunes, 18 de enero de 2010

Comenzaré de nuevo con el fin de despegarme un poco de lo que me causa este mareo


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Siempre me quejo de mi ropa, es demasiado grande o ajustada, suelo reducirla para que se vea mejor, pero ya no corto tanta tela como antes y no he querido agregar retazos a algunas prendas pues pequeñas se ven bien, por lo tanto siguen sin ser estrenadas. Cuando no corto, acostumbro coser, ahora por mucho, meto de 2 a 3 cm y quisiera poder hacerla más chica.

Hace como un año reduje la talla de un vestido largo, es de mis preferidos, todo de encaje negro y cuello en V; medí mi cintura y cosí justo a la medida, solo hubo una pequeña falla...

los huesos de mis hombros y de mi cadera no permitian el paso libre
no podia entrar en él!!!
Un cierre sería la solución, asi al ponerme el vestido lo abro, ya que todo este en su lugar lo cierro y listo! pegadito, pegadito.

Todo fue bien, el vestido lo use en dos ocasiones, me sentí tan linda cubierta de encaje negro, hasta que en la tercer puesta todo cambio.

Que ingenua soy, solo la constancia es la que dará fruto de mi trabajo, si no, todo sería en valde y asi resultó. Me olvide de mi y actué cual ladrón: andando de noche, ocultandome, urgando y tomando lo que no. Me traicione haciendome la tonta. Hasta que desperté de la mentira y tengo el recuerdo intacto...

Tenía yo entre mis manos lo que no me hacia falta en realidad y me incline para ver si encontraba algo más, mis manos estaban llenas y sin embargo, buscaba más, más, más, más. Fue cuando dí cuenta de lo que hacía -tan debíl como en ocasiones anteriores- llenandome la boca de suciedad, me recorrió un frío tremendo, como un soplido de viento y ví una luz cegadora que helo mi mente. Segundos pasaron para parpadear y darme cuenta que estaba ante la nevera.

No recuerdo cuanto tiempo hice lo mismo, pues aveces no, otras muchas si. Me siento mal por ello, aunque no sobre pasé el límite lamentablemente he tenido que sacrificar el encaje negro.

Ese fue el error que cometí y la razón por la cuál mi perfección cuelga de un viejo gancho, empolvandose y mostrandome un cierre mal cosido cada que veo este cuerpo sin encaje negro.

2 comentarios:

Genkibones dijo...

Ay hermosa tirza!! ke pena me da lo de tu vestido, ke coraje!! a mi me ha ´pasado tantas veces!! es horrible!!!
pero no te preokupes, pronto te keda de nuevo bien!!!
komo has estado chika??
yo si ando atareadona con la escuela y a parte ya me meti a la unam entonces ahora son dos!!l pero estopy contenta!! a ver cuando nos vemos!!
un abrazo amiga!!

Bertha Pappenheim dijo...

Hola ^^

Si, ese insomnio... Hoy traté de dormir temprano pero a las 3 hrs el sueño había muerto y heme aquí...

Me gustó eso que escribiste, deberías seguir publicando.

Saluditos.